La llegada, o liberación, de la tecnología de impresión en tres dimensiones y la proliferación de impresoras en el mercado ofrecen posibilidades inimaginables hasta la fecha para el desarrollo y personalización de productos o adaptaciones a bajo coste. Los diferentes procesos de fabricación industrial de productos en serie hacen imposible, o muy costoso, poder fabricar o adaptar un producto específico para una persona en concreto. Gracias a la impresión 3D podemos diseñar y crear un objeto único y personalizado sin tener que recurrir a la industria.